Pero las hazañas del pasado en nada despeinan siquiera el presente, es más, la luz de las cosas que fueron oscurece ahora, por contraste, estos días. ¿ No se dice una buena mañana te quiero y la mañana siguiente ya no te quiero? Él mismo lo había dicho. Y así se divide el mundo en dos. Es el precio a pagar por la libertad de Caín y del resto de su estirpe de asesinos. ¡Pero hay que seguir amigo mío! ¡No se me paren en la puerta que me obtruyen el local!

[...]

Al fin y al cabo, Sebastián no iba a volver a nacer y lo sabía, y aunque naciera mil veces, en nada conseguiría desviar ni un centímetro su propia naturaleza. Sebastián, por más que tratase de eludirlo, se sentía tan condenado como cualquiera a no ser más de lo que era. De su alma hay poco que decir, más allá de la evidencia de que está, a día de hoy, apagada. Y sin embargo no del todo discapacitada para la arrogancia, pues cada mañana, tal vez cada hora del día, Sebastián es capaz de imaginar alguna clase de victoria, por más que sea incapaz de consumarla.

[...]


En su cabeza caminan ejércitos, y aún puede imaginar a sus enemigos asustados. Como ese último segundo de todos los tiranos en el que no queda más remedio que matar a los mensajeros que insisten en traer noticias de la derrota, Sebastián se mantiene firme en su escondite sujetando en una mano las cápsulas de cianuro y en la otra los mapas de la victoria final.

[...]

La verdad se le escapaba. Se le escapaba por completo. Y no dejaba de asombrarle la capacidad que tenían algunas personas para sujetar la verdad por el cuello.


Ray Loriga, Ya sólo habla de amor.

1 comentario:

  1. Soy tu fan jaja

    De verdad tenés mucho talento y tus fotos son increibles.

    Felicitaciones y felicidades,

    Buen comienzo de año.


    Saludos desde Argentina*

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